Como ya hemos empezado el curso, ya teneís el primer trabajo. Como os dije, tendréis que buscar alguno de los mitos sobre la Creación del mundo de alguna de las culturas antiguas de la Humanidad (Sumerios, Babilónicos, Egipto, Mayas, Incas, Sioux,...) para trabajar sobre él. El trabajo tiene dos partes. Primero, un relato de ese mito, literal si no es muy largo, en cuyo caso, es suficiente un resumen. La segunda parte del trabajo consiste en un análisis de ese mito. Como modelo os ha de servir la interpretación que hicimos en clase sobre el mito del Génesis bíblico, el significado de los distintos elementos, las diferencias entre la creación de las cosas y criaturas, por la palabra de Yahweh, y la creación del hombre, fruto del esfuerzo físico de Yahweh que lo modela de barro y le sopla su propio espíritu,...
Todo esto es importante porque el mito no es una simple leyenda ni un simple cuento. La definición que hemos visto en clase supone dotar al mito de su significado más profundo, de su papel en las antiguas civilizaciones humanas. Recordad que definíamos el mito como el relato de una comunidad que explica el sentido de su presencia en el mundo. Responde a tres cuestiones fundamentales:
- ¿por qué hay lo que hay?
- ¿quién o quienes son los creadores?
- ¿para qué existe lo que hay?
Es importante también no perder la perspectiva histórica. Hablamos de hace cuatro o seis mil años, algo que no podemos juzgar con los conocimientos del siglo XXI. Los mitos no suponen, ni pretenden, una explicación científico-objetiva de la realidad. Lo que quieren es entender el mundo para saber qué hacer. Desde el primer día ya os dije que la única función de la filosofía es responder a la pregunta sobre cómo alcanzar nuestra felicidad, Puede gustarnos o no la respuesta; podemos estar o no de acuerdo con esa misma respuesta. Pero sólo hay auténtica filosofía en la búsqueda de esa respuesta. Todo lo demás son, como decía Ortega, "filosoferías", conocimientos inútiles y estériles que no llevan a ningún sitio.
De ahí que el mito, sin ser filosofía, comparte con ésta la necesidad de dar respuetas a las preguntas que no podemos dejar de responder. Como bien Dijo Kant, aún cuando sepamos que nunca vamos a poder contestarlas definitivamente, no podemos dejar de hacernoslas.
En fin, este va a ser el camino que comenzamos este curso. Esperemos que nos lleve a buen término.
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